"Mi abuela dec�a" Una gu�a para el crecimiento personal, profesional y espiritualEl t�tulo del libro hace referencia a aquellas madres y abuelas que, con sus sabios consejos, se toman el tiempo para orientar a sus hijos o nietos en diferentes aspectos de la vida, ayud�ndolos a ser mejores personas, m�s sociables, m�s anal�ticos, provey�ndoles de las herramientas necesarias para una mejor convivencia y desarrollo social, sicol�gico y personal.Resulta incre�ble pero cuando somos ni�os, j�venes o ...
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"Mi abuela dec�a" Una gu�a para el crecimiento personal, profesional y espiritualEl t�tulo del libro hace referencia a aquellas madres y abuelas que, con sus sabios consejos, se toman el tiempo para orientar a sus hijos o nietos en diferentes aspectos de la vida, ayud�ndolos a ser mejores personas, m�s sociables, m�s anal�ticos, provey�ndoles de las herramientas necesarias para una mejor convivencia y desarrollo social, sicol�gico y personal.Resulta incre�ble pero cuando somos ni�os, j�venes o adolescentes, pareci�semos estar un poco sordos a los m�gicos y atinados consejos que nos dan nuestros abuelos o cualquier otra persona adulta a nuestro alrededor...Poco a poco cuando nos hacemos adultos vienen a nuestra mente todas aquellas frases y consejos que de j�venes decidimos ignorar y que ahora resultan ser como m�gicas, pues entendemos que son ciertas y que poseen aplicaci�n a diferentes circunstancias de nuestra vida, e incluso las repetimos a nuestros hijos, sobrinos o nietos, creyendo tal vez que entender�n lo que no supimos nosotros en nuestro momento comprender.Cuando j�venes, muchas veces nos invade la chispa de la rebeld�a y el egocentrismo, transform�ndonos en ese tipo de persona que cree que sus propias opiniones e intereses son m�s importantes que las de los dem�s, lo cual nos hace no atender a los consejos y orientaciones que provengan otras personas y menos si proviene de adultos ajenos a nuestro n�cleo familiar.Contrario a lo que muchas veces solemos pensar, la experiencia no nace con nosotros, ni mucho menos es algo que pudi�semos comprar; simplemente se adquiere con los a�os y a�os de vida, con el convivir diario, con los errores y desaciertos superados.Cada respiro, cada ca�da, cada m�gico momento de nuestra vida aporta su cuota de conocimiento, que aunada a los sabios consejos que nos aportan aquellas personas que en realidad nos quieren y valoran contribuyen a hacernos personas de �xito, personas de bien y muchas veces modelos a seguir.
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