Una recopilaci�n de ensayos imprescindible sobre la moral en pol�tica. En este libro, Michael Sandel aborda algunos de los temas morales y pol�ticos m�s controvertidos de nuestro tiempo, incluidos el suicidio asistido, el aborto, la investigaci�n con c�lulas madre, la brecha entre ricos y pobres, el papel de los mercados y el lugar de la religi�n en la vida pol�tica. Sostiene que los ideales m�s prominentes en nuestra vida pol�tica, los derechos individuales y la libertad de elecci�n, no proporcionan ...
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Una recopilaci�n de ensayos imprescindible sobre la moral en pol�tica. En este libro, Michael Sandel aborda algunos de los temas morales y pol�ticos m�s controvertidos de nuestro tiempo, incluidos el suicidio asistido, el aborto, la investigaci�n con c�lulas madre, la brecha entre ricos y pobres, el papel de los mercados y el lugar de la religi�n en la vida pol�tica. Sostiene que los ideales m�s prominentes en nuestra vida pol�tica, los derechos individuales y la libertad de elecci�n, no proporcionan por s� mismos una �tica adecuada para una sociedad democr�tica. Estos ensayos demuestran que el discurso moral no est� re�ido con los prop�sitos progresivos, y que una sociedad pluralista no necesita evitar involucrarse en las convicciones morales y religiosas que sus ciudadanos aportan a la vida p�blica. ENGLISH DESCRIPTION In this book, Michael Sandel takes up some of the hotly contested moral and political issues of our time, including affirmative action, assisted suicide, abortion, gay rights, stem cell research, the meaning of toleration and civility, the gap between rich and poor, the role of markets, and the place of religion in public life. He argues that the most prominent ideals in our political life--individual rights and freedom of choice--do not by themselves provide an adequate ethic for a democratic society. Sandel calls for a politics that gives greater emphasis to citizenship, community, and civic virtue, and that grapples more directly with questions of the good life. Liberals often worry that inviting moral and religious argument into the public sphere runs the risk of intolerance and coercion. These essays respond to that concern by showing that substantive moral discourse is not at odds with progressive public purposes, and that a pluralist society need not shrink from engaging the moral and religious convictions that its citizens bring to public life.
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