Katharine Kuh ingreso al Instituto de Arte de Chicago en 1943 y dedico dos decadas a escribir critica de arte contemporaneo. Galerista, conservadora, curadora y coleccionista, creia que para comprender cabalmente una obra y transmitirla al publico habia que tener una total implicacion. Asi, guardo familiaridad con pintores como Leger, Rothko, Kline y Hopper, arquitectos como Mies van der Rohe y escultores como Constantin Brancusi. A ese mundo artistico e intelectual estan dedicadas estas memorias, escritas por la autora a ...
Read More
Katharine Kuh ingreso al Instituto de Arte de Chicago en 1943 y dedico dos decadas a escribir critica de arte contemporaneo. Galerista, conservadora, curadora y coleccionista, creia que para comprender cabalmente una obra y transmitirla al publico habia que tener una total implicacion. Asi, guardo familiaridad con pintores como Leger, Rothko, Kline y Hopper, arquitectos como Mies van der Rohe y escultores como Constantin Brancusi. A ese mundo artistico e intelectual estan dedicadas estas memorias, escritas por la autora a los ochenta y siete anos y completadas a su muerte por Avis Berman, su amiga y albacea literaria.
Read Less